PRONUNCIAMIENTO DE ÚLTIMA HORA

Desde la tribuna de los de abajo, desde quienes no tienen medios de comunicación masiva, sino un alto espíritu de servicio al país, quiero dirigirme a los peruanos y peruanas con el mayor respeto y alzar mi voz junto al pueblo que lucha diariamente por hacer del Perú un Perú más democrático, justo, libre y humano.

Justamente en este momento histórico y decisivo, a puertas de elegir al próximo Presidente de la Republica del Perú, todos y todas debemos de cerrar filas y sentar posiciones claras y firmes en defensa de nuestra patria, en defensa de las miles de víctimas de la pobreza y la violencia política que sufrieron hambre, dolor y muerte sin misericordia y compasión, y que jamás los olvidaremos, y que hoy sus gritos llegan con más fuerza a nuestros oídos clamando justicia y paz.

A estas alturas del tiempo no nos cabe la menor duda que la mafia fujimorista, con sus manos sucias, manchadas de sangre, desbordando balas y billetes, pretenda nuevamente asaltar al Estado peruano y conducir a los pobres a la mayor pobreza, y a los ricos a la mayor riqueza.

Les digo a mis hermanos y hermanas del Perú, de los barrios y pueblos humildes de las 24 regiones del país, a los demócratas, progresistas y liberales, que marchemos juntos sin miedo para que no se repitan las violaciones a los derechos humanos, y que pongamos fin a las detenciones arbitrarias, las persecuciones a líderes y lideras sociales y políticos, los grupos paramilitares, los genocidios, las fosas comunes, las esterilizaciones forzadas a madres campesinas y nativas; para que no regrese el chantaje, los tránsfugas, el clientelismo político, la prensa amarilla, la mordaza y las negociaciones oscuras con empresarios mineros irresponsables y narcotraficantes que envenenan a las nuevas  generaciones de nuestra nación.

¡BASTA YA!. No permitamos que conviertan a los pobres, olvidados y últimos de nuestras comunidades en mendigos del Estado utilizando programas asistencialistas, dádivas y falsas ilusiones, que en el fondo solo generaron el culto a la personalidad de Alberto Fujimori, como si fuera el salvador del Perú, cuando lo único que ha sido es un DICTADOR, CORRUPTO Y ASESINO. Y que hoy se encuentra pagando sus delitos en la cárcel.

Todos sabemos que el objetivo de la candidatura de Keiko Fujimori es liberar a su padre, en caso de que ganara las elecciones presidenciales ella no gobernará sino Alberto Fujimori. Por otro lado, no es nada gratuito que actualmente los congresistas electos, miembros del equipo técnico, un sector del empresariado y la prensa amarilla del fujimorismo estén desesperados por la campaña de Keiko Fujimori. De llegar el fujimorismo al Palacio de Gobierno sabemos por experiencia que someterá a su mando los poderes del Estado (Legislativo, Ejecutivo, Judicial), los medios de comunicación, la Fuerza Armada, el JNE, la ONPE, entre otros, para perennizarse en el poder y hacer de nuestro país su propia chacra.

La única forma de contrarrestar este eminente peligro nacional es votar por Ollanta Humala del Partido Nacionalista del Perú. Es otorgarle una oportunidad a esta persona para que gobierne el país. Podemos tener dudas de él pero del fujimorismo tenemos un sin número de pruebas. Votemos por Ollanta Humala pero siendo críticos y vigilantes de sus promesas. Si este 5 de Junio Ollanta Humala triunfa en las elecciones presidenciales de segunda vuelta también nosotros y nosotras habremos triunfado nuevamente frente al fujimorismo.

¡Dile NO a Keiko!… ¡Dile SI a Ollanta!.

Félix Guillen Ayala

El Agustino-Lima